Vamos a estrenar nuestro blog hablando de la historia de lo que hoy en día es nuestra pasión y nuestro trabajo.
Pero para comenzar con esta historia tenemos que remontarnos muchos siglos atrás…
La evidencia más temprana de impresión data del siglo II y más concretamente en el antiguo oriente.
Los chinos en esta época utilizaban bloques de madera para transferir imágenes talladas de flores a sedas y otros tejidos.
Seguimos hablando del mismo lugar, pero siete siglos después, donde se tienen los primeros conocimientos de las primeras impresiones en papel. En el año 868 se creó el primer libro impreso completo que llevaba por título “Sutra de Diamante” aunque en unas nuevas excavaciones realizadas recientemente han descubierto unos impresos que podrían estar fechados entre 750-751. En 1040 el inventor Pi Sheng creo el primer sistema de impresión con tipos móviles.
En el año 868 se creó el primer libro impreso completo que llevaba por título “Sutra de Diamante”.
Pero nos hemos adelantado mucho en la historia. Es momento de retroceder un poco en el tiempo, y aunque no se sabe con exactitud cuál fue la primera creación que podría considerarse como calcografía, es cierto que la primera técnica utilizada era el estarcido o también el llamado esténcil. Una técnica muy sencilla que consistía en trazar una imagen o dibujo colocándolo sobre una base que se quería estampar y se pintaba toda la superficie consiguiendo una copia exacta de la imagen dibujada en la plantilla.
Otra de las técnicas que se tienen constancia, que fue de las primeras técnicas en aparecer, es la serigrafía. Existen muchas versiones de donde apareció por primera vez y no se sabe si esta técnica se lo debemos atribuir a los egipcios, chinos o japoneses. Lo que si sabemos que dicha técnica apareció varios siglos antes de cristo.
Pero no fue hasta 1452 cuando Johannes Gutenberg un artesano e inventor alemán comenzó a imprimir el proyecto más importante hasta ese momento realizado, que era la producción de la llamada Biblia de Gutenberg y sentando las bases de la impresión hasta el siglo XX.
La impresión de la biblia de Gutenberg estableció las bases de la impresión hasta el siglo XX.
Con el desarrollo de la imprenta, otra técnica de reproducción en serie, fue creciendo paralelamente a esta, se trataba en este caso de los grabados. Esta técnica se basaba en transferir o copiar una imagen sobre una plancha rígida utilizando punzones o procesos químicos de tal manera que pudiese alojarse la tinta en las diferentes hendiduras resultantes para después transferirlas a papel mediante presión o a telas.
Los resultados que salían de este proceso se les conocía comúnmente como estampas y desde que existió esta técnica se formaron expertos artesanos de nombres tan reconocidos como Goya, Durero o Rembrandt.
En el año 1796, en Munich, el checo Alois Senefelder descubrió la Litografía, una técnica que consistía en una estampación obtenida a partir de una matriz de piedra con la diferencia que esta técnica no es un sistema de grabado como lo era la xilografía o calcografía por ello más que impresión podríamos llamarla estampación.
Desde que comenzó la litografía siempre se había intentado la impresión a color, pero sin mucho éxito por eso la forma más común de litografías a color eran las que estaban coloreadas artesanalmente a mano.
No fue hasta el 15 de enero de 1837 cuando un alemán residente en Francia de nombre Godefroy Engelmann inventa el sistema para realizar litografías en color.
Este proceso de litografías en color recibe el nombre de cromolitografía, se trataba de un proceso muy complejo donde se utilizaban una plancha por cada una de las tintas que se querían utilizar, era muy normal utilizar más de 15 planchas.
Los periódicos fueron los causantes del desarrollo de las primeras rotativas modernas. Fue el norteamericano Richard March Hoe en 1845 quien registro por primera vez una patente de estas rotativas nuevas y mucho más rápidas.
Pero no fue hasta el año siguiente cuando el inglés Smart invento una rotativa con casi todos los procesos automatizados. Los únicos que no se pudieron automatizar fue la entrada y salida del papel.
Fue en 1848 cuando el diario londinense The Times puso en funcionamiento este tipo de rotativas y siguió perfeccionándolas.
En 1860 apareció la patente de otro gran invento que revoluciono todos los medios de comunicación impresos, fue la foto-transparencia que permitía reproducir en prensa una imagen fotográfica.
La primera imprenta rotativa litográfica offset fue creada en Inglaterra y patentada en 1875 por Robert Barclay. Este desarrollo combinaba tecnologías de impresión por transferencia a mediados del siglo XIX y la prensa de impresión rotativa 1843 de Richard March Hoe, una prensa que utilizaba un cilindro de metal en lugar de una piedra plana. El cilindro compensado estaba cubierto con un cartón especialmente tratado que transfería la imagen impresa de la piedra a la superficie del metal. Más tarde, el recubrimiento de cartón del cilindro compensado se cambió a caucho, que sigue siendo el material más comúnmente utilizado.
Al inicio del siglo XX se introdujo en occidente la Serigrafía, aunque los antecedentes vienen de mucho antes de la china. Esta técnica de impresión es utilizada en la reproducción de documentos e imágenes sobre cualquier material. La imagen se transfiere a través de una grasa o malla de tejido tensado en un marco. El paso de la tinta se bloquea en las zonas donde no habrá imagen por un barniz o emulsión de un material fotosensible.
La serigrafía hace posible la impresión en varios soportes con costes relativamente reducidos en tiradas cortas.
Finalmente llegamos hasta la actualidad para hablar de nuestra manera de trabajar y es que la revolución tecnológica e informática revolucionó el mundo de la impresión con las nuevas técnicas digitales y las nuevas máquinas de impresión o de inyección.
La impresión digital es la evolución de la impresión offset pero pudiendo hacer asumibles los costes de tiradas cortas.
Nuestra empresa se caracteriza por estar especializada en la impresión inkjet donde conseguimos unos suaves degradados y rica en matices Este tipo de impresión es la preferida por artistas, fotógrafos, diseñadores… dada la calidad de impresión que se puede llegar a conseguir.
Otra de nuestras especialidades es la impresión UVI o UV, la cual es especial para poder imprimir materiales rígidos y flexibles, debido al curado de estas tintas con las lámparas de luz ultravioleta. Podemos imprimir sobre casi cualquier material por su secado inmediato que evita una ganancia de punto indeseada.
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